La sugerente pregunta llevada a cabo por Leibniz y luego retomada por Heidegger; tomaba como punto de partida una inquietud por el ser y su imposición sobre la nada o el no ser.Lebiniz se preguntaba ¿por qué es el ente y no más bien la nada?. Difícil inquietud que, aún hoy, no haya respuesta adecuada.
Recordemos los anteriores:
1- Copernico descubre que la tierra no es el centro del universo; éste es un planeta más de la vía Láctea.
2-Darwing logra demostrar que no somos los reyes de la creación. Según el él descendemos de los primates.
3- Freud descubre la existencia de un discurso no consciente; él lo llamo inconsciente, que muchas veces contradice nuestras premisas conscientes.
4- Propondría como un cuarto golpe al orgullo de nuestra especie, precisamente, la imposibilidad de dar respuestas acabadas a cuestiones varias.
Esta actitud esta bien documentada en los textos históricos, sobre todo los del siglo 18 (siglo de las luces).
En la actualidad no creo que haya mucha fe en la fuerza de la razón para evolucionar hasta estratos cada vez más satisfactorios para la humanidad. Es más, parece que el 99% del universo esta compuesto por materia oscura. Podría decirse que vivimos entre tinieblas y, las velas son pocas.
Empecé hablando de la pregunta por el ser de Leibniz y miren hasta donde llegue. Este texto breve es un buen ejemplo de lo que es escribir sobre filosofía. Siempre nos vamos por las ramas; a veces resulta divertido pero, otras, nos causa un estupor que nos impacienta hasta exclamar dichos tales como: ¡Es mejor dedicarse a cosas prácticas! ; ¡Las ciencias duras son mas precisas!, mejor cultivémoslas.
Pienso que la filosofía viene a coincidir con el sentido común en esto: Nos vamos por las ramas. Esta característica esta presente en todos; pero este no es el temas que me propuse discutir al principio, de manera tal que lo dejamos acá, por el momento.




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